Hacía unos años que venía albergando la idea de crear un website (y hacerla una plataforma) para la comunidad latina en Seattle, pero fue hasta finales del 2015 que finalmente planifiqué con seriedad y aposté en esta idea por muchas buenas razones.
No se si te ha pasado a tí, pero a mí me sucedía que cada vez que necesitaba encontrar un punto central con información de interés de lo que sucedía a mi alrededor y que tocara aspectos en nuestra comunidad latina en esta región del país (el PNW), me sentía desorientada, desmotivada y decepcionada con lo que veía -o no veía-.
Pasaba visitando de un website a otro con muy pocos buenos resultados; llegando a páginas web sin terminar (sabiendo que por nuestras otras ocupaciones eso suele pasar) y que seguían activas por años. Veía espacios digitales que no mostraban ní la cara de los creadores, ní de los responsables de estos espacios, haciendo que de plano no confiara en lo que publicaban. Me causaba gracia ver sitios web creados por corporaciones y grandes empresas con la intención de llegar al mercado latino/hispano aquí, pero cuya estrategia demostraba que ni siquiera nos entendían como consumidores. Muchas veces, las imágenes que mostraban no representaban lo que realmente somos: una comunidad diversa, con estilos únicos, múltiples talentos y perspectivas particulares y significativas.
Algo curioso en todo esto es que a muchas empresas que trabajan en línea (es decir, en Internet) aún les cuesta creer que para nosotros es importante y rico comunicarnos y escucharnos en español cada vez que podamos y consideramos correcto – es simplemente parte de recordar y avivar nuestra cultura. Es que simplemente hay cosas que no podemos decir más que en nuestra lengua materna y con nuestro ¡sabor! ¿No lo crees?
Pero ¿sabes también que noté en mi búsqueda?
Me topé con una cantidad considerable de personas que estaban ‘blogueando’ (creando contenido en websites), emprendedores y profesionales escribiendo sobre temas que nos importan a muchos de nosotros pero que no tenían suficiente marketing, publicidad o promoción – es decir, pocos de nosotros llegabamos a conocerles aún siendo que incluso era una gran necesidad saber de ellos–.
Y esto no solamente se quedaba allí.
Cuando salía para reuniones de networking (socializar con propósito de conectar para trabajos), o a llevar a mi hijo al parque, o de camino a la escuela, siempre terminaba conversando con latinoamericanos tan agradables que me compartían muchas de las cosas que hacían y de lo que les gustaría se hiciera con más frecuencia en sus alrededores. Me encontraba con latinos, inmigrantes muchos de ellos, en pequeños negocios iniciando tantos proyectos bonitos con deseos de darse a conocer más y encontrar maneras de cómo crecer profesionalmente.
Y tristemente, también escuchaba a la gente decir frases como estas: “es que la comunidad latina no es unida aquí”, “esa persona abrió su negocio, pero es que no sabe de negocios, no va a durar mucho”, “a ese entrenador [o estilista] ni en su casa lo conocen”. Comparto esto porque me inquietó profundamente y sentí la necesidad de contribuir a generar conciencia sobre ideas erróneas —y a veces mal infundadas— que se escuchaban entre nuestra gente. Me preocupaba que eso fuera lo que mi hijo terminara aprendiendo y creyendo. Entonces, una frase vino a mi mente: “¿Sol, por qué no intentas hacer algo para cambiar eso?” ¡Y sí! Me animé.
Tenemos que ser participes de cambios que nos sirvan a todos –esas frases negativas y mal infundadas que se regaban no me servían a mí para nada. Y estoy segura que a tanta gente trabajadora, luchadora y dedicada tampoco le servían–. Hay que continuar propiciando iniciativas que dejen una buena cara, que inspiren a nuestras pequeñas generaciones (nuestros chicos y jóvenes). Sigo escribiendo y me contagio mucho más.
Pero también soy realista, no todo es fácil y no puedo (ni quiero) hacer todo ello sola.
Todos queremos que en nuestras vidas pasen cosas diferentes –de esas que mejoran nuestra calidad de vida–, y por seguro todos queremos participar en actividades que nos representen bonito y bien. ¡A mi particularmente eso me encanta! Y de hecho, creo en que inventando y creando juntos uno siempre logra resultados mejores –y se vive una transformación en donde uno nunca termina siendo el mismo–. Y mira, como inmigrantes, en donde muchos no tienen casi nada fácil para iniciar y transformar su vida, es inteligente buscar crear con otros algo que genere un grato impacto.
Un día, camino al supermercado, se me acercaron unas personas preguntando si tenía información sobre un servicio en particular, pero que estuviera disponible en español. También me preguntaron si conocía algún grupo deportivo activo para sus hijos —algo que, curiosamente, yo misma había estado buscando poco tiempo antes. Intercambiamos intereses sobre grupos y clases, idealmente impartidas por personas de nuestra propia cultura. Comentábamos que no existía un punto central donde encontrar esa información. En ese momento comprendí que muchos de nosotros ni siquiera sabíamos dónde buscar esos datos desde nuestra computadora o teléfono.
Hacia el año 2015, todavía no existía un lugar donde encontrar información confiable, actualizada con frecuencia y disponible en español. Tampoco se reflejaba con intención la contribución de la comunidad latina e hispana en las distintas áreas de nuestro estado. Eran tiempos en los que el tema de la diversidad, la equidad y la inclusión comenzaba a tomar fuerza, y surgieron poderosos movimientos sociales para alzar la voz y abogar por más representación de los grupos minoritarios. ¡Qué emoción vivir ese despertar colectivo!
Para no hacer esta historia tan larga, te comparto todo ello porque es la semillita que propició este proyecto.
Quiero participarte que vas a ver este espacio digital en evolución constante mientras organizo y defino categorías, objetivos, estrategias, segmentos para mejor uso, y también para servir tu interés y buscar maneras de ingresos sostenibles. Estoy siempre conectando con muchas personas en cada rinconcito de nuestro Washington, detallo cuidadosamente a aquellos quienes tienen potencial para colaboraciones o alianzas en diferentes áreas e industrias, conecto con emprendedores que cultivan una mentalidad abierta a proyectos en equipos, y estoy alerta de todo aquello que se alinee a la visión que tengo para Latina Seattle: Conocer, compartir y educar de la comunidad en Washington en sus distintas áreas, en español y con gran enfoque a servir al latino e hispanoparlante, y a quien aprecie y valore nuestro idioma y cultura.
Mi gran labor, la que toma mucha de mi energía, es aprender de cada experiencia y error las maneras para traer a la luz el trabajo y la contribución de muchas personas aquí con sus tantas facetas de la vida. En ese camino, será un gusto igualmente conocerte. Aprovecho con ello para invitarte a que nos sigas y conectes en nuestras redes sociales en Twitter, en Facebook, en YouTube y en Instagram. Por allí compartimos de lo que hacemos y tendrás la oportunidad de conectar con una variedad de seres realmente geniales.
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Sin más por ahora, siéntente bienvenido/a a este espacio digital.
Sol Gonzalez
Creadora y Editora en Jefe.